Upskilling y Reskilling
La crisis sanitaria mundial ha puesto de manifiesto la necesidad de acelerar la transformación digital de las empresas, y como consecuencia de ello la necesaria dotación a los empleados de conocimientos y habilidades adecuadas para afrontar las necesidades de la propia empresa. En este contexto, los departamentos de recursos humanos deberán poner en práctica nuevos métodos de formación para adaptar las competencias de los trabajadores a los nuevos desempeños digitales. Dichos métodos son el Upskilling y Reskilling.
El servicio de Upskilling hace referencia a la formación que recibe el trabajador, ampliando sus competencias en más áreas laborales con el objetivo de aumentar su efectividad y desempeño.
Por el contrario, Reskilling, también conocido como reciclaje profesional, consiste en el proceso de ampliación de conocimiento del empleado para así poder adaptarlo a un nuevo puesto dentro de la empresa.
Ambos procesos están diseñados en base a cubrir la escasez de perfiles digitales del mercado laboral, formando así a trabajadores más especializados y versátiles.
La aplicación de dichos métodos puesta en práctica conlleva una serie de beneficios tanto para el trabajador como para la empresa en su conjunto.
Ventajas de carácter intrínseco como el aumento de motivación, creatividad y aprendizaje activo de cara al empleado, o extrínseco a la hora de ahorrar costes de reclutamiento y selección, aumento de coordinación y disminución del tiempo, o dinamización empresarial son algunos ejemplos a tener en cuenta que ponen de manifiesto la importancia de métodos de formación actualizados a la época actual.