La Diversidad Laboral
Uno de los activos que se está teniendo en cuenta con mayor relevancia hoy en día en el mundo empresarial, no es otro que la diversidad en el ámbito de trabajo.
Tanto la diversidad como la inclusión son aspectos fundamentales que condicionan la posibilidad de desarrollo, y evolución para alcanzar los objetivos fijados por las empresas. En este sentido, su gestión constituye un elemento estratégico que requiere de un análisis minucioso para correcta integración en la propia identidad y cultura corporativa empresarial.
El análisis de las políticas de diversidad laboral en las empresas se encuentra actualmente en un entorno cambiante. Tradicionalmente dicha política, se dividía en cuatro tipos principales: diversidad de género, funcional, generacional y LGBT. Sin embargo, la política de diversidad tiene que considerar, de manera conjunta, la propia inclusión, lo que posibilita la gestión del conjunto de personas y en la actualidad, la eliminación de prejuicios en torno a dicho conjunto.
A este respecto, la adecuada gestión de diversidad e inclusión laboral conlleva el análisis de factores tales como la relación de los trabajadores con la empresa, y la atención a sus necesidades e intereses; el reclutamiento de talento basado en competencias y habilidades del individuo, obviando así arbitrariedades o prejuicios; y el empoderamiento social de aquellas comunidades más afectadas y vulnerables a la segregación laboral.
De este modo las empresas pueden lograr visualizar la importancia de la distinción entre diversidad e inclusión para así poder lograr su adecuada implementación y complementariedad en sus modelos de negocio.